Hola, soy Lluís y tengo que decir que no estaría aquí si no fuese por una bicicleta, sí, una bicicleta.
Y os preguntaréis qué tiene que ver las bicicletas con la fotografía, pues tienen una cosa en común que se llama: LIBERTAD, así en mayúscula.
Todo empezó en el 2016, cuando cansado de mi trabajo que tenía entonces, decidí dar un giro en mi vida de 365 grados. Y ese giro se llamaría GLOVO, la empresa que te lleva cualquier cosa a casa en 5 minutos.
Pues allí empecé yo a trabajar, solamente con un móvil y una bicicleta, llevaba los pedidos a casa de los clientes, pedidos que yo cogía anteriormente en el móvil y se los llevaba en bicicleta. Me movía por Barcelona. Para mí eso fue una liberación, poder trabajar libremente en Barcelona con bicicleta y elegir mis horarios yo solo.
Pues entre pedido y pedido empecé a hacer fotografías de Barcelona, con el móvil, y las subía en Instagram. A la gente les empezó a gustar y allí me fui dedicando poco a poco a este bonito oficio.
Hasta que me tope con las bodas, allí supe que sería lo que querría dedicarme sí o sí. ¡Encontré mi pasión! El poder crear recuerdos del día más importante de las vidas de muchas parejas fue algo espectacular.
Os cuento todo esto porque creo es necesario que me conozcáis, igual que a mí me gustaría conoceros. Un novio me dijo una vez: «tú no te das cuenta, pero eres una persona muy importante para nosotros en nuestro día más especial» y eso me dejo pensando. Y así es. El día de la boda os intento ayudar al máximo posible en todo.
Y ya, casi sin darme cuenta, llevo más de 5 años colándome en la vida de muchas personas, viviendo junto a ellos momentos alucinantes. Me siento super afortunado de tener el trabajo que tengo.
Tengo dos hijas y una mujer y las amo con locura a las tres. Sin ellas y su apoyo, yo no seria quien soy.